En ceremonia efectuada en el Liceo B-4, el alcalde de Arica dijo que «debemos pensar la ciudad de manera universal. Y seguir trabajando fuertemente en la inclusión laboral”.
Porque en Chile no tenemos un modelo universal, y prevalece una mirada excluyente, carente de amor y la solidaridad, la Municipalidad de Arica con el apoyo financiero del Gobierno Regional y con la Fundación Impulso como unidad ejecutora; está desarrollando trabajos de difusión, formación e inclusión de la comunidad sorda de Arica.
En la etapa de escuelas y liceos, el programa beneficia a 30 niños y niñas del Centro de Capacitación Laboral, Instituto Comercial, de las escuelas D-21, E-15, D-10, del Colegio “Cardenal Samoré”, del Arica College y de los Liceos Artístico y B-4.
«Lamentablemente el sistema y la educación no se adaptan a todas las personas, sobre todo a los niños, las niñas y los adolescentes que son sordos«, dijo el alcalde Gerardo Espíndola.
Porque la ciudad no la hacen los edificios, los fierros y el cemento, sino, la hacen las personas, el alcalde de Arica dijo que «debemos pensar la ciudad de manera universal. Y seguir trabajando fuertemente en la inclusión laboral”.
Con recursos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional, el mencionado programa busca apoyar a las personas con discapacidad auditiva, a través de la inclusión laboral, alfabetización e inclusión social de los escolares en sus establecimientos educacionales.
En la emotiva jornada realizada en el Liceo B-4, un grupo de personas con discapacidad auditiva recibieron sus correspondientes certificados, cumpliendo así, una importante etapa que fue aplaudida por el alcalde Espíndola, el diputado Luis Malla, el seremi de Educación Francisco Valcarce, el director de la Dideco, Paolo Yévenes y representantes del Senadis, del Servicio Local de Educación Pública y directores de escuelas y Liceos.