El alcalde Gerardo Espíndola convocó una mesa intersectorial municipal, con el fin de buscar qué acciones puede realizar el municipio dentro del marco de la ley.
El alcalde de Arica, Gerardo Espíndola Rojas, encabezó una mesa municipal, para tratar el aumento de tomas ilegales que ocurre en la comuna, situación acusada por la actual administración comunal desde hace más de un año.
Debido a que muchas de estas ocupaciones ocurren en terrenos de terceros, se restringe el radio de acción de la administración comunal, permitiendo principalmente la denuncia a las autoridades competentes o a los privados dueños de los terrenos, para que adopten las medidas ante una situación que conlleva un sinnúmero de incivilidades como basurales, consumo irregular de agua y de luz, entre otros.
Es por ello que la máxima autoridad comunal, mandató a las áreas edilicias pertinentes a buscar los caminos legales que permitan al municipio adoptar medidas, para abordar esta compleja situación que no sólo afecta a Arica, sino que se ha evidenciado a nivel nacional.
“Nosotros llevamos más de un año trabajando y denunciando las tomas que están ocurriendo, especialmente en las zonas rurales de Arica. Sin embargo, hoy estamos viendo que, en zonas urbanas o cercanas a estas, siguen creciendo las tomas y frente a ello hay que tomar acciones mucho más drásticas”, señaló el alcalde Espíndola.
Desde la Dipreseh se realizará una georreferenciación para identificar todos los terrenos ocupados de forma irregular, tanto municipales como fiscales y privados, en un trabajo que considerará la zona urbana y la rural.
Además, será convocada una mesa de trabajo con los servicios públicos competentes, con el fin de acordar acciones concretas en torno a esta problemática y establecer las competencias que cada servicio tiene.
Asimismo, la municipalidad comenzará a exigir cierres perimetrales en los sitios eriazos y propiedades abandonadas con o sin edificación, atribución autorizada por la Ordenanza General de Urbanismo y Construcción, en su artículo 2.5.1.
Finalmente, serán valorizados los gastos que significa para la DIMAO el retiro de basura en sitios eriazos, verdaderos microvertederos que son generados por quienes se toman de manera ilegal estos espacios y de los cuales deben hacerse responsables.
“Vemos que no necesariamente hay problemas de vulnerabilidad, sino que muchas veces nos encontramos con organizaciones que están detrás de estas tomas de terreno, y que finalmente le pasan la cuenta a la comunidad porque se acumula basura, porque se requieren otro tipo de necesidades como agua”, manifestó.
Espíndola sentenció que esta situación ocurre “sin ningún tipo de planificación u ordenamiento territorial, tomándose de manera ilegal terrenos públicos o privados. Esto genera un daño, sin duda, a nuestra ciudad”.