Las manifestaciones del gremio transportista han impedido que cientos de agricultores puedan exportar sus cosechas al resto del país, sufriendo mermas económicas gravísimas que ponen en riesgo sus negocios.
La Municipalidad de Arica y la Delegación Presidencial Regional, citaron a distintos organismos públicos y civiles a una reunión extraordinaria, para tratar en profundidad la crisis que afecta al sector agrícola local producto del paro de camioneros.
El alcalde de Arica, Gerardo Espíndola Rojas, llegó junto al concejal Mario Mamani a las dependencias de la Delegación, oportunidad en la que conversaron con el delegado Ricardo Sanzana y la seremi de Agricultura, Ana Cecilia Rojas, sobre el profundo daño económico que han sufrido cientos de pequeños agricultores quienes no han podido exportar sus productos al resto del país, mercado que significa el 95 por ciento de la venta regional.
“Lamentablemente, por una demanda de un sector se están viendo perjudicados diferentes sectores de nuestra ciudad y, especialmente, los agricultores, más aún el pequeño agricultor que está yendo a pérdida” manifestó en la ocasión el alcalde Espíndola.
El jefe comunal agregó que el actual paro de camioneros puede significar un “tiro de gracia” para pequeños agricultores que van a perder sus cosechas, la que hoy están vendiendo a precios bajísimos en Arica para recuperar algo de la inversión realizada.
“El llamado es a que pensemos como ciudad, a que pensemos de manera solidaria, donde todos somos responsables del desarrollo de Arica. No por las demandas de unos, van a estar pagando las consecuencias otras que son parte fundamental de la economía de la ciudad”, sentenció la máxima autoridad comunal.
Según explicó el concejal Mamani, quien conoce de cerca la realidad de la comunidad agrícola de los valles de Lluta y Azapa, el principal rubro de la comuna puede sufrir un daño irreparable de no existir una fórmula que permita retomar las exportaciones, pues muchos agricultores hoy se encuentran pagando créditos que permitieron soportar la crisis de pandemia y los cuales hoy estarían en riesgos de no poder ser cancelados.
“Todo es muy lamentable, lo que está ocurriendo hoy en día. Todos sabemos que a nivel nacional se reciben productos de nuestro valle y esto ha sido una pérdida bastante alta para la agricultura. Es tiempo de buscar soluciones y tomar decisiones que, a futuro, permitan al pequeño agricultor apalancar un poco los gastos que tiene”.
Desde el inicio del paro de camioneros, el Gobierno ha mantenido constantes reuniones con el sector agrícola regional, no solo para conocer la realidad diaria del sector económico, sino también para barajar alternativas que permitan sostenerlo.
“Hay una preocupación de parte nuestra como Gobierno de lo que son no sólo la actividad agrícola, sino también otras actividades que son vinculadas a la interacción con la carga”, expresó el delegado Ricardo Sanzana.
Junto con ello, indicó que “son economías familiares muchas de ellas, las que están viendo hoy afectados todo su capital invertido. Por una irresponsabilidad se está viendo afectada, se está afectando a la población en general, además, en cuanto a la distribución de la misma carga y estamos afectando también al país, familia por familia. Por lo tanto, nosotros estamos dando todo el apoyo necesario para poder generar las condiciones para que no sólo puedan sacar su carga, sino que además la puedan poner en el destino final”.
En tanto, la seremi Rojas declaró que “hay acciones de corto, mediano y largo plazo. Aquí hay que, de alguna manera, subsanar esta forma de hacer cautiva a la agricultura familiar campesina, como una moneda de cambio de negociaciones en un paro de los camioneros que no es el primero de este año. Lo que hemos visto es que debemos mejorar los niveles de logística, para transporte y no solo verlo desde el punto de vista carretero, sino que explorar qué pasa con el tema aéreo y marítimo para las cargas de la agricultura regional, trabajar en cooperativismo, asociatividad, para buscar mejores mercados y generar instrumentos de inteligencia de mercado que permitan destinar nuestra producción a lugares que hoy estén necesitando productos agrícolas.